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21 leyes irrefutables del liderazgo.doc.ugd

INTRODUCCIÓN


¿Cómo puedo ser un mejor líder? Me hago esta pregunta todos los días de mi vida. Continuamente busco nuevas cosas para aprender y modos de crecer. Pero a veces la mejor manera de aprender es volver a los fundamentos. Después de todo, eso es lo que hacen los entrenadores profesionales cuando quieren agudizar las habilidades de sus jugadores, sean estos novatos o campeones experimentados.

Esto fue lo que me impulsó a regresar a la Fuente, al más grande libro de liderazgo de todos los tiempos: la Biblia. Cada lección sobre liderazgo que he enseñado se ha basado en principios bíblicos. Ahora, en Los 21 minutos más poderosos en el día de un líder , traigo a la línea frontal el liderazgo contenido en la Biblia. Al examinar la vida de los grandes líderes bíblicos, podemos aprender más sobre liderazgo y aplicar los principios aprendidos a nuestra vida cotidiana.

Este libro es un instrumento para desarrollar liderazgo. No tiene como objetivo que se lea de una sentada. Está diseñado para consumirse en bocaditos diarios y digerirse lentamente. Por esta razón, póngalo en algún punto de su agenda donde pueda leerlo a su conveniencia cinco días por semana.

Si sigue el proceso según lo he diseñado, pasará las próximas veintiuna semanas estudiando con cuidado este material. El libro está organizado en torno a The 21 Irrefutable Laws of Leadership [21 leyes irrefutables del liderazgo]. Cada semana pasará cuatro días aprendiendo algo sobre liderazgo de un personaje bíblico diferente. Cada día se enfoca en un pensamiento predominante sobre liderazgo, contiene una lección aprendida del líder bíblico y plantea una pregunta para que medite durante todo el día. El quinto día le ayudará a cambiar su enfoque de pensar en el liderazgo a actuar en él a medida que da los pasos que le ayudarán a ser un mejor líder.

Espero que se deleite los próximos meses viviendo con algunos de los más grandes líderes en la historia de la humanidad, y con algunos que pudieron serlo pero no lo fueron. He aprendido maravillosas lecciones de ellos, y espero que usted también lo haga.


Ley 1º

LA LEY DE LA TAPA (o EL TOPE)


la habilidad de liderazgo determina el nivel de eficiencia de una persona

El éxito está al alcance de casi cualquier persona. Pero… el éxito personal sin la capacidad de liderazgo produce una eficiencia limitada. El impacto de una persona solo llega a una fracción de lo que lograría con un buen liderazgo. Mientras más alto quiera escalar, más necesita del liderazgo. Mientras mayor impacto quiera lograr, mayor es la influencia que necesita tener…

La habilidad de liderazgo es la tapa que determina el nivel de eficiencia de la persona. Mientras más baja es la capacidad de dirigir, más baja estará la tapa sobre su potencial. Mientras más elevado el liderazgo, mayor la eficiencia … Su capacidad de liderazgo, para bien o para mal, siempre determina su eficacia y el impacto potencial de su organización … Para alcanzar los más elevados niveles de eficiencia, tiene que subir la tapa de su capacidad de líder.


Saúl, David y la Ley de la Tapa


Toda persona tiene el potencial para convertirse en líder.


Lecturas bíblicas

1 Samuel 10.17–24; 13.5–15; 15.10–16.13; 17.32–18.16

2 Samuel 5.1–5; 11.1–5, 14–15, 26–27; 12.1–15

Las apariencias engañan. En ocasiones miramos a una persona y asumimos que tiene todo lo necesario para ser un gran líder. Ese fue el caso de Saúl. La Biblia nos dice:

Había un varón de Benjamín, hombre valeroso, el cual se llamaba Cis… Y tenía él un hijo que se llamaba Saúl, joven y hermoso. Entre los hijos de Israel no había otro más hermoso que él; de hombros arriba sobrepasaba a cualquiera del pueblo (1 Samuel 9.1–2).

Cuando el pueblo de Israel pidió un rey, Dios le dio a Saúl, y todos esperaban que fuese un gran líder. Pero el pueblo miró su apariencia exterior mientras Dios miró su corazón. No pasó mucho tiempo antes que Saúl, hombre poderoso y con gran potencial, se desacreditara a sí mismo y su liderazgo, y Dios designara un nuevo líder en su lugar. Entonces eligió a David, un hombre conforme al corazón de Dios.


Dos reyes con diferentes tapas en el liderazgo

¿Por qué Saúl fracasó como rey de Israel mientras David, que parecía más débil, tuvo éxito? Podemos hallar la respuesta en la Ley de la Tapa: La habilidad de liderazgo determina el nivel de eficiencia de una persona. Mientras David trató de ser mejor líder y tuvo varias experiencias que le permitieron elevar el nivel de su tapa, la actitud de Saúl mantuvo la tapa firmemente sellada sobre su liderazgo.


La habilidad de liderazgo determina el nivel de eficiencia de una persona.

Echemos un vistazo a los senderos similares que estos hombres transitaron:


1. ambos recibieron consejo de hombres piadosos

La unción y las oportunidades otorgadas a Saúl y David fueron sorprendentemente similares. Ambos fueron ungidos por Samuel, el último juez de la nación hebrea. Ambos recibieron el beneficio de consejos piadosos: Saúl lo recibió de Samuel y David de Samuel y luego de Natán, el profeta. Pero observe qué diferentes fueron sus reinados como monarcas.

En realidad, Saúl nunca entendió la naturaleza del liderazgo. El día que fue instituido como rey, se escondió de la gente. Creo que lo hizo porque reconocía su incapacidad para dirigir. Pero después de probar el éxito en una batalla, confundió su posición como rey con el verdadero liderazgo. Aunque tenía el título, el poder y la corona de un rey, nunca llevó la monarquía más allá de un gobierno regido por lo carismático. Fue hecho general, pero nunca logró reunir un ejército estable. No creó un gobierno organizado para preservar sus logros. Cuando Dios ya no lo favoreció, pensó que el título de rey le daba derecho a seguir haciendo de líder.

Por otra parte, David aprovechó las oportunidades para crecer en su liderazgo. Aprendió a ser guerrero. Levantó un ejército permanente y venció a sus enemigos. Eligió una ciudad y la conquistó para convertirla en la nueva capital de la nación, y luego organizó en ella un gobierno duradero. Mucho de eso lo hizo antes de ocupar el trono. Desde el comienzo, lo amó todo el pueblo de Israel y de Judá ( 1 Samuel 18.16 ). David atrajo a ciudadanos, guerreros y líderes por igual, y los dirigió bien. Como resultado de su liderazgo, el pueblo floreció.


2. ambos enfrentaron grandes desafíos

Todo líder enfrenta obstáculos, pruebas y tribulaciones. Saúl y David a veces enfrentaron los mismos. Por ejemplo, tomemos a Goliat. Cuando el gigantesco filisteo ofreció luchar contra el campeón de Israel, Saúl y David escucharon el desafío del gigante. Saúl, el principal guerrero de Israel y quien debió enfrentar al gigante, reaccionó y se escondió amedrentado. Pero David, aun un muchacho, estaba deseoso de aceptar el desafío y ganar la honra para Dios.

¿Cuál fue la reacción de Saúl? Ofreció su armadura a David (¿Por qué no? ¡Él no iba a usarla!) Mientras otros esperan para ver qué va a ocurrir, los líderes se levantan y se enfrentan al desafío.


3. ambos tuvieron la oportunidad de cambiar y crecer

Las reacciones tan diferentes de estos dos hombres cuando enfrentan sus fracasos retratan las dos naturalezas de Saúl y David. Cuando en desobediencia, Saúl ofreció un holocausto a Dios, Samuel lo reprendió. La Escritura guarda silencio sobre lo que vino luego. No hay un relato de tristeza o arrepentimiento de parte de Saúl. En cambio, el relato sigue con la guerra de Saúl contra los filisteos. Evidentemente se mantuvo en la misma dirección.

Por otra parte, ante su pecado, la reacción de David fue diferente. Después de cometer adulterio con Betsabé y de mandar al marido de esta a la muerte, Natán lo confrontó, y el rey se arrepintió sintiendo un agudo pesar.


El que subió la tapa

La interacción de David con Natán es representativa de su actitud durante su vida. Nunca tuvo miedo de reconocer sus fracasos, de pedir a Dios el perdón y la bendición, y de mejorar personalmente. Es la razón por la que la tapa de su liderazgo subió más y más alto.

Todos podemos aprender de David. Si queremos alcanzar nuestro potencial y convertirnos en la persona que Dios quiere que seamos, necesitamos elevar las tapas de nuestras vidas. Es la única manera de pasar a otro nivel.


Pregunta de reflexión para hoy:

En su liderazgo, ¿ha sido más como Saúl o como David?

Pensamiento sobre liderazgo para hoy:


Todo líder tiene tapas.

Entonces Samuel dijo a Saúl: Locamente has hecho; no guardaste el mandamiento de Jehová tu Dios que él te había ordenado; pues ahora Jehová hubiera confirmado tu reino sobre Israel para siempre. Mas ahora tu reino no será duradero (1 Samuel 13.13–14).

Todo líder tiene tapas en su vida. Nadie nace sin ellas. No desaparecen cuando la persona recibe un título, alcanza una posición o es investido de poder. El asunto no es si tiene tapas o no. El asunto es lo que va a hacer con ellas.


Las tapas que limitaron a Saúl


Dios hizo a Saúl rey de Israel, quitó todas las tapas externas de la vida del nuevo gobernante. Saúl recibió la unción de Dios, asumió la posición de rey y tenía el potencial de convertirse en un gran líder. Pero aunque no tenía tapas exteriores en su liderazgo, aun quedaban en él tapas internas. Y eran muchas:


Cada líder tiene tapas en su vida. El asunto no es si tiene tapas o no. El asunto es lo que va a hacer con ellas.

• Miedo. Comenzó su reinado escondiéndose entre el bagaje, y tuvo miedo de enfrentar a Goliat.

Impaciencia. Se negó a esperar a Samuel y tuvo el atrevimiento hacia Dios de ofrecer con sus manos el holocausto que debía ser presentado exclusivamente por un sacerdote.

Rechazo. Cuando Samuel le dijo que había sido desechado como rey, Saúl siguió como si todo estuviera bien.

• Impulsividad. En forma imprudente e irreflexiva hizo un juramento que casi le costó la vida de su hijo Jonatan.

Fraude. Usó a su hija Mical como soborno al ofrecerla a David como esposa si vencía a los filisteos, pero la esperanza de Saúl en realidad era que David muriera en la batalla.

• Celos. Se puso furioso cuando el pueblo lo comparó con David. De allí en adelante su ojo celoso estuvo puesto sobre el hombre que consideró como enemigo.

Enojo. Más de una vez intentó matar a David con su lanza mientras éste tocaba el arpa para él.

La mayoría de las tapas de Saúl tenían que ver con la debilidad de su carácter. Desafortunadamente estaba más preocupado en guardar las apariencias que en limpiar su carácter. Aun cuando fue desechado como rey, Saúl estaba muy preocupado por el qué dirán. Suplicó a Samuel: «Yo he pecado; pero te ruego que me honres delante de los ancianos de mi pueblo y delante de Israel» ( 1 Samuel 15.30 ). Puesto que nunca quitó las tapas de su liderazgo, Dios lo sacó del trono de Israel.


Las tapas que no limitaron a David



Cuando usted examina la vida de David ve que también tenía diversas tapas en su vida, internas y externas:


1. su familia

Las limitaciones de David comenzaban en su hogar. Cuando se le pidió a Isaí, su padre, que reuniera a todos sus hijos para que Samuel eligiera al nuevo rey de Israel, David no fue invitado a participar. Su padre lo despreció y lo pasó por alto.

Lo mismo hicieron sus hermanos. Cuando David fue al frente de batalla a visitarlos, se hizo evidente el desprecio de ellos hacia él. Cuando David habló con firmeza contra el blasfemo desafío de Goliat, sus hermanos lo insultaron y le pidieron que se fuera a casa.


2. su líder

Saúl trató continuamente de inhibir el liderazgo y eficacia de David. Cuando David se ofreció para pelear con el gigante, Saúl le dijo: «No podrás tú ir contra aquel filisteo, para pelear con él» (1 Samuel 17.33 ). Entonces trató de ponerle su pesada armadura al muchacho. Más tarde Saúl declaró que David era su enemigo. Por muchos años, Saúl trató de matarlo repetidas veces.


3. su trasfondo

Saúl provenía de una familia buena y poderosa. Se describe a su padre como «Cis, hombre valeroso, hijo de Abiel, hijo de Zeror, hijo de Becorat, hijo de Afía, hijo de un benjamita» (1 Samuel 9.1 ). Sin lugar a dudas, era terrateniente, líder en su tribu y comandante militar en los tiempos de guerra. Por otra parte, David era de una familia pobre de pastores. Se describe como hijo de Isaí de Belén, hombre sin linaje elevado y sin una poderosa posición. David tampoco era el hijo mayor. Era el octavo y menor de la familia.


4. su juventud e inexperiencia

Cuando fue ungido por Samuel, David era solo un muchacho y no tenía otra experiencia sino la de cuidar ovejas. Cuando avanzó para enfrentarse a Goliat, se le consideró solo un muchacho y nunca había peleado en una batalla. Una y otra vez la gente lo menospreció y le faltó el respeto por tales razones. Finalmente David se convirtió en gran líder; sin embargo no fue porque no tuviera limitaciones en la vida. Logró mucho porque se dedicó a levantar sus tapas. Ese es el tema de la lección de mañana.


Pregunta de reflexión para hoy:

¿Qué tapas hay en su vida?

Pensamiento sobre liderazgo para hoy:


El líder puede levantar algunas tapas.

Y Saúl vistió a David con sus ropas, y puso sobre su cabeza un casco de bronce, y le armó de coraza. Y ciñó David su espada sobre sus vestidos, y probó a andar, porque nunca había hecho la prueba. Y dijo David a Saúl: Yo no puedo andar con esto, porque nunca lo practiqué. Y David echó de sí aquellas cosas (1 Samuel 17.38–39).

David fue capaz de llegar lejos a pesar de las circunstancias adversas y sus numerosas tapas limitantes. ¿Por qué? Porque a diferencia de Saúl, se dedicó a levantar sus tapas. Cuando observa la vida de David, nota el patrón de levantar tapas que lo ayudó a seguir creciendo y avanzar hacia un nuevo nivel. Cuando el líder levanta la tapa no solo libera su potencial personal sino que también libera la tapa del potencial de su gente y su organización.


Las tapas que levantó David


1. david primero levantó la tapa de sí mismo

La vida de David demuestra la práctica de exigir primero la superación personal. Observe su actitud ante Goliat. A pesar de no haber estado nunca en una batalla, usó su experiencia como pastor a modo de preparación. Había aprendido a usar la honda y había enfrentado el ataque de un león y un oso; ambas bestias muy peligrosas y mucho más poderosas que él. Debido a esas experiencias creció en valor, confianza y fe. Así, el día que peleó contra Goliat—y enfrentó la tapa de su inexperiencia en la guerra—David levantó la tapa.


Para que la organización crezca, haga crecer al líder.


Con frecuencia la gente me pregunta qué se necesita para que una organización crezca.

A esa pregunta siempre respondo lo mismo: «Para que la organización crezca, haga crecer al líder». Todo comienza y termina con él. Debido a que David levantó primero su tapa y creció, removió la primera, y con frecuencia la más limitante de las tapas de la organización: el líder.


2. david levantó la tapa para quienes estaban cerca de él

En cuanto el líder levanta su tapa, comienzan a ocurrir cosas increíbles. Antes que David llegara, todo el ejército israelita estaba aterrorizado por los filisteos. Pusieron su línea de combate en el valle de Ela y escuchaban las burlas de Goliat cada mañana y cada noche ¡durante cuarenta días! ¿Qué hizo Saúl, su líder? Se escondió. Saúl era la tapa para todo el ejército de Israel.

Pero en cuanto David entró en escena y ejerció su liderazgo capaz de levantar tapas, al matar a Goliat, removió la tapa de todo el ejército: «Y cuando los filisteos vieron a su paladín muerto, huyeron. Levantándose luego los de Israel y los de Judá, gritaron, y siguieron a los filisteos… Y cayeron los heridos de los filisteos por el camino» (1 Samuel 17.51–52 ). Los guerreros de Israel les infligieron una resonante derrota.


3. david levantó la tapa para toda la nación

Con el tiempo, a medida que David siguió ejerciendo una fe profunda y un sano liderazgo, levantó la tapa para toda la nación. Ese proceso comenzó casi de inmediato, mientras el pueblo comentaba: «Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez miles» 1 Samuel 18.7). Gracias al liderazgo de David, el pueblo finalmente comenzó a creer que con el favor de Dios, ellos podrían hacer algo. Y aumentaron las victorias de Israel sobre sus enemigos. Hacia el final del reinado de David, su reinado unificó las regiones de Israel y Judá, e incorporó las potencias de Edom, Amón y Soba. La nación creció en poder y el reinado de David solo fue superado por el de Salomón, su hijo.

A todos nos gusta tener una oportunidad. Pero muchas personas quieren que la oportunidad les llegue antes de comenzar a mejorar ellos mismos y así poder aprovecharla. Cuando alcance esa posición, comenzaré a crecer. Eso es hacer las cosas al revés. Él creció primero, levantando su tapa personal, y cuando llegó el momento de la gran oportunidad, estaba listo para ella. Cuando enfrentó una tapa que no podía remover por sí mismo, permitió que otros le ayudaran. Mañana discutiremos más al respecto.

Pregunta de reflexión para hoy:



¿Qué tapas puede usted levantar?

Pensamiento sobre liderazgo para hoy:


Pocos líderes permiten que otros levanten tapas en sus vidas.

E hicieron pacto Jonatán y David, porque él le amaba como a sí mismo. Y Jonatán se quitó el manto que llevaba, y se lo dio a David, y otras ropas suyas, hasta su espada, su arco y su talabarte… Habló Saúl a Jonatán su hijo, y a todos sus siervos, para que matasen a David; pero Jonatán hijo de Saúl amaba a David en gran manera, y dio aviso a David, diciendo: Saúl mi padre procura matarte; por tanto cuídate hasta la mañana, y estate en lugar oculto y escóndete. Y yo saldré y estaré junto a mi padre en el campo donde estés; y hablaré de ti a mi padre, y te haré saber lo que haya (1 Samuel 18.3–4 ; 19.1–3 ).

Hay ocasiones en que el líder enfrenta un problema o limitación que no puede remover por sí mismo. Cuando se topan con esas limitaciones, algunos líderes renuncian y dejan de crecer. Ese es el comienzo del fin de su organización. Pero unos cuantos líderes, los que tienen el valor y la humildad para aprender, se reúnen con otros líderes que pueden ayudarle a levantar la tapa de sus vidas. Esto ocurrió con David, y la persona que le levantó la tapa fue nada menos que Jonatán, el hijo de Saúl.


¿Y qué de los levantadores de tapa?

Los levantadores de tapa siempre muestran tres cualidades que ayudan a los demás a avanzar a otro nivel. Siempre se puede contar con que ellos …


1. levantarán las tapas de otros con sus palabras

Los levantadores de tapas animan. La Escritura narra que Jonatan y David hicieron un pacto entre sí:

Entonces dijo Jonatan a David: ¡Jehová Dios de Israel, sea testigo! Cuando le haya preguntado a mi padre mañana a esta hora, o el día tercero, si resultare bien para con David, entonces enviaré a ti para hacértelo saber. Pero si mi padre intentare hacerte mal, Jehová haga así a Jonatan, y aun le añada, si no te lo hiciere saber y te enviare para que te vayas en paz. Y esté Jehová contigo, como estuvo con mi padre. Y si yo viviere, harás conmigo misericordia de Jehová, para que no muera, y no apartarás tu misericordia de mi casa para siempre. Cuando Jehová haya cortado uno por uno los enemigos de David de la tierra, no dejes que el nombre de Jonatán sea quitado de la casa de David. Así hizo Jonatan pacto con la casa de David, diciendo: Requiéralo Jehová de la mano de los enemigos de David (1 Samuel 20.12–16 ).

Jonatan levantó a David constantemente. Fue un estímulo para David cuando su futuro parecía más negro que nunca. Le dio esperanza y le ayudó a encontrar valor para seguir adelante a pesar de sus desesperadas circunstancias.


2. levantarán a otros con sus acciones

Decirle palabras positivas a alguien es bastante fácil. Se requiere compromiso para respaldar las palabras con acciones. Jonatan estaba dispuesto a hacer esto, aun cuando estuvo a punto de perder su vida.

Jonatan fue fiel a su palabra e informó a su amigo la intención que tenía su padre de matarlo. Pero aun antes de esto, Jonatan había tomado un papel activo en el progreso y bienestar de David. Cuando dio a David su manto, armadura, espada, arco y talabarte, estaba haciendo una afirmación. El manto real haría que David—un plebeyo—se destacara en medio de todo el pueblo de Israel. Con su armadura no solo le equipó, sino que también le honró, y mostró la disposición de Jonatan de exponerse a ser vulnerable en beneficio suyo.

Cuando Jonatan dijo a David: «Lo que deseare tu alma, haré por ti» 1 Samuel 20.4), lo dijo porque así lo haría. Respaldó sus palabras con su acción.


3. cederán para que otros puedan subir

Una cosa es dar ánimo y recursos a una persona para levantarla. Pero es otra sacrificarse por ellas para que puedan ascender a otro nivel. Sin embargo, eso fue lo que Jonatán hizo.

Como primogénito de Saúl, Jonatan era el primero en la línea de sucesión para el trono de Israel. Jonatan tendría que haber odiado a David, al hombre que Dios había ungido para desplazarlo. Pero Jonatan estaba dispuesto a renunciar a todo en favor de su amigo:

Viendo, pues, David que Saúl había salido en busca de su vida, se estuvo en Hores, en el desierto de Zif. Entonces se levantó Jonatan hijo de Saúl y vino a David a Hores, y fortaleció su mano en Dios. Y le dijo: No temas, pues no te hallará la mano de Saúl mi padre, y tú reinarás sobre Israel, y yo seré segundo después de ti; y aun Saúl mi padre así lo sabe. Y ambos hicieron pacto delante de Jehová; y David se quedó en Hores, y Jonatan se volvió a su casa. (1 Samuel 23.15–18)

Jonatan, de quien cualquiera hubiera esperado que fuera una tapa pesada sobre la vida de David, tuvo la determinación de ser el que le levantara la tapa. Sin la ayuda de Jonatan, David no hubiera sobrevivido ni hubiera alcanzado el trono.

Hay tapas en su vida que usted solo no puede levantar. A veces, como en el caso de David, un levantador de tapas le busca. En otras ocasiones, tiene que salir a buscar uno. Pero no importa cómo sea, si quiere avanzar a un nivel más elevado, no puede lograrlo solo.

Pregunta de reflexión para hoy:

¿Qué levantadores de tapa hay en su vida?

Cómo dar vida a esta ley

1º Asimílela


Medite en las siguientes afirmaciones:


1. Toda Persona Tiene El Potencial Para Convertirse En Líder.

2. Todo Líder Tiene Tapas.

3. El Líder Puede Levantar Algunas Tapas.

4. Pocos Líderes Permiten Que Otros Levanten Tapas En Sus Vidas.


¿Cuán consciente está usted de las diversas tapas que hay en su vida? ¿Cuál es su actitud en cuanto a ellas? ¿Ha asumido la responsabilidad de levantarlas, como lo hizo David? ¿Está dispuesto a ser suficientemente humilde y vulnerable para dejar que un levantador de tapas entre en su vida?


2º Organícela

Si no está seguro dónde se encuentra cuando se trata de entender y aplicar la Ley de la Tapa, visite el sitio en Internet « www.injoy.com/21Minutes » para contestar un cuestionario de evaluación de veinticinco preguntas que le ayudarán a medir su habilidad.


3º Póngala en oración

Ore para que Dios lo capacite para el liderazgo.


4º Vívala

Dedique hoy el tiempo necesario para anotar todas las tapas que detecte en su vida. Comience concentrándose en las características internas, que pueden incluir cualidades de carácter, habilidades de liderazgo y capacidades relacionales. Luego haga una lista de las tapas externas, que pueden relacionarse con sus circunstancias, edad, entre otras. Ahora, ordene las tapas en tres categorías: (1) tapas que puedo levantar (haga planes para enfrentarlas personalmente); (2) tapas que otros pueden levantar (busque mentores que le ayuden al respecto); y (3) hechos de la vida (acostúmbrese a ellos porque no puede cambiarlos).


5º Divúlguela

¿Qué concepto, idea o práctica específica de liderazgo que ha aprendido en esta semana transmitirá a otro líder en los próximos dos días?


Cuestionario de preguntas: 1º Ley.

1/ Qué es lo que determina el nivel de eficiencia de una persona?

2/ ¿Por qué Saúl fracasó como rey de Israel mientras David, que parecía más débil, tuvo éxito? Explíquelo bien.

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EMANUEL GONÇALVES

El hombre detrás       de"Lo Justo"

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